La Intriga Detrás de las Cortinas: Inglaterra, Estados Unidos y el Plan para Debilitar a España y Controlar Hispanoamérica
La historia de América Latina está repleta de conflictos, luchas por la independencia y cambios geopolíticos. A lo largo de los siglos, potencias extranjeras como Inglaterra y Estados Unidos han jugado un papel clave en la conformación del destino de la región. En este artículo, exploramos cómo Inglaterra planificó y financió la separación de las provincias españolas en América para debilitar a España y hacerse con el comercio, y cómo Estados Unidos ha perpetuado su política de dominación sobre Hispanoamérica para evitar que se unan en una super nación que compita como igual.
Inglaterra y la lucha por la independencia de las provincias españolas
Durante el siglo XVIII y principios del XIX, Inglaterra tenía un interés económico y político en debilitar a España y expandir su influencia en América. Para lograr esto, Inglaterra adoptó una política de apoyo a los movimientos independentistas en las provincias españolas de América. Proporcionaron ayuda financiera, suministros militares y apoyo político a los líderes rebeldes como Simón Bolívar y José de San Martín (que serían grandes traidores a la nación que les vio nacer)
Esta estrategia tenía dos objetivos principales: en primer lugar, debilitar a España y reducir su poder e influencia en el escenario mundial. En segundo lugar, al fomentar la independencia de las provincias españolas, Inglaterra esperaba abrir nuevos mercados para sus productos y obtener un mayor control sobre el comercio en la región.
La política de dominación de Estados Unidos en Hispanoamérica
Tras la independencia de las provincias españolas, Estados Unidos comenzó a tomar un papel más activo en la política de Hispanoamérica. La Doctrina Monroe de 1823, que proclamaba la oposición de Estados Unidos a cualquier intervención europea en América, sentó las bases para una política de dominación en la región.
A lo largo del siglo XIX y XX, Estados Unidos intervino en numerosos países latinoamericanos, tanto directa como indirectamente. Estas intervenciones a menudo tenían como objetivo proteger sus intereses económicos y políticos, así como evitar que cualquier potencia europea, especialmente Inglaterra, ganara una posición dominante en la región.
El temor a una super nación hispanoamericana
Una de las preocupaciones de Estados Unidos a lo largo de su historia ha sido la posibilidad de que los países de América Latina se unan en una super nación que compita con ellos en igualdad de condiciones. Esta super nación, formada por la unión de los países de habla hispana, podría desafiar el poder e influencia de Estados Unidos en el continente y representar una amenaza a sus intereses económicos y políticos.
Para evitar esta posibilidad, Estados Unidos ha promovido políticas de división y conflicto entre los países latinoamericanos. A través de la intervención militar, el apoyo a regímenes autoritarios y la influencia en las decisiones políticas y económicas de la región, Estados Unidos ha trabajado para mantener un control firme sobre Hispanoamérica y evitar cualquier unión que pudiera amenazar su posición dominante.